México y Perú registraron ante la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI), el Acuerdo de Integración Comercial (AIC), suscrito entre ambos países en abril pasado. Este Acuerdo remplazará al ACE N° 8, en vigencia desde 1987.
Entre los objetivos de este Acuerdo figuran estimular la expansión y diversificación del comercio entre ambos países, eliminar las barreras al comercio y facilitar la circulación de mercancías y servicio, y promover condiciones de competencia leal en el comercio.
El Representante Permanente de México, Emb. Cassio Luiselli afirmó que “este acuerdo de integración comercial que estamos sumando con Perú es un acuerdo de última generación que incluye la liberación de bienes, servicios, movilidad de personas, reconocimiento a los institutos universitarios, creando una sinergia integradora muy poderosa con el Perú y desde luego inversiones y mecanismos en solución de controversias.”
Por su parte, el Representante Permanente del Perú ante la ALADI y MERCOSUR a.i. , Jorge Tello expresó que el Acuerdo es un documento importante que cubre casi todo el universo dentro del comercio bilateral. “El Perú se congratula con México” recalcó el Ministro Tello, y agregó que su país desea llevar este acuerdo con los demás países miembros de la ALADI.
Por último, el Secretario General de la ALADI, Carlos Chacho Alvarez, señaló que la importancia ahora de ir alcanzando una convergencia entre los distintos acuerdos entre los países a fin de fortalecer el espacio regional, aumentar los intercambios y la cooperación con el resultado de vigorizar el proceso de unidad latinoamericana.
El Acuerdo refrenda el compromiso de México y Perú por la diversificación de sus exportaciones en condiciones preferenciales y la promoción de los flujos de inversión entre ambos países. Entre el 2000 y el 2010, el intercambio comercial bilateral creció a una tasa promedio anual de 13% y aumentó de US$ 414 millones a US$1,456 millones. Asimismo, se estima que el acuerdo permitirá que su comercio bilateral se duplique en cinco años e impulse las exportaciones de productos no tradicionales.
Entre los principales productos comercializados entre ambos países se encuentran receptores de televisión, tractocamiones, automóviles, medicamentos, vehículos, aparatos de telefonía, alimentos infantiles, entre otros.
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